Los que tuvimos la suerte de comer uno de sus caramelos , no nos podemos olvidar del inconfundible grito de "chuenga ...chuenga " cuando hacía su aparición en cualquier cancha de fútbol o espéctaculo deportivo que fuera popular . Chuenga era el apódo que tenía José Pastor y vendía sus caramelos masticables a cambio de monedas . Por 25 cvos te daba un puñadito , por 50 uno más grande y por un peso te daba el puñado completo . Nadie se ponía a contar esos caramelos , mal embolsados con un plástico que sobraba por todos lados o a nadie se le ocurría preguntarle de que sabor eran ...porque ese Sr. era todo un personaje muy respetado y conocido en los ambientes futboleros y no futboleros .
Llevaba los caramelos sueltos en un bolsa tipo arpillera que cargaba entre sus hombros .
Tuve la suerte ( aunque sus caramelos eran durísimos ) de conocerlo en una pelea de Ringo Bonavena en el Luna tratando de abrirse paso entre la multitud que llenaba ese estadio o volverlo a ver una noche de cena en la pizzería el "Hombre de oro " de Villa Luro dónde dicen que vivía cerca y la verdad es que lo recuerdo como si fuera hoy . Sus gritos y sus caramelos han quedado registrados para siempre en el imaginario popular . El Monumental lo debe haber albergado miles de veces y sus gritos de deben haber confundido entre la multitud pero no debemos olvidarnos nunca de él , murió físicamente en el 84 pero su huella y su incansable trajín de cancha en cancha no se olvida .
Aquí en una foto con su bolsa y sus caramelos
Muy buen recuerdo, mi viejo me contó de este tipo y más de una vez apareció con caramelos al grito de "chuenga chuenga"
ResponderEliminarUn abrazo
en una cancha de rugby le compré ,le di tres pesos y me dio una miseria,protesté ,me contestó : PIBE CÓMO SE VE QUE NO VAS A LA FERIA!!
ResponderEliminarcon más precisión!!CÓMO SE VE QUE NO VAS A LA BOLSA!!ATRÁS DE LA CAMPERA LLEVABA LA PROPAGANDA DE ACADEMIAS OLI DE PELUQUERÍA..
ResponderEliminarGracias Eduardo por tu lindo recuerdo .
ResponderEliminarUna vez me acuerdo que le dije al chuenguero, maestro no traigo efectivo sencillo conmigo, me da un puñado por un par de forros?? (mostrandole los bufalo de entonces) metio la mano en la bolsa la saco vacia, lo mire sorprendido y me dio un bife que me dejo aturdido!!! Ni me la vi venir!
ResponderEliminarLa última vez que lo vi ya en el final de su carrera. Fue por el 80 en el club San Andrés en un encuentro de basket en la vieja cancha de la calle Casares. No se el motivo pero varias veces en poco tiempo lo encontré, en la Cancha de Chacarita, los bosques de Palermo y en el ferrocarril Mitre, es que aprovechaba el viaje para ir vendiendo y rotaba de zona ¿Donde guardaba el alijo? O esa bolsa era infinita o algún hijo lo seguía a la distancia con varias al hombro.
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